jueves, 18 de diciembre de 2008

Estás...

Estas en cada palabra, en cada silencio te oigo gritar…
En cada lagrima, en cada risa desenfrenada que carece de causas…
Te encuentro en mis sueños y lloro cuando no estas…
Te veo de a flashes y supongo que estas, simplemente aca…
Apareces en cada alusión que catalogan como un acto morboso, y en cada chiste que me hace recordar sin llorar…pero sin quererlo estas, me acompañas en todos y cada uno de mis pasos. En cada teléfono que atiendo y en cada palabra de aliento…
Estas en mis enojos por buscar un final justo y en cada escalón que me cuesta trepar…
Estas en los ojos de quienes veo transitar y en aquel pobre hombre que encuentra su final en una cama de hospital…
Apareces tras cada página de ese libro que me cuesta descifrar y me iluminas frente a ese examen que me demuestra que no todo ha sido en vano… que a veces sirve pelear.
Estas en mis noches de sentencia y en mis mañanas al despertar…
En cada pliegue de mis sabanas y en la almohada donde me permito divagar…
Estas, simple y audaz…
Estas cuando me acurruco en lo que creo son tus brazos…
Estas cuando miro al cielo y no haces mas que escuchar y mas aun en cada suplica que busca alejar de mi las responsabilidades, que ya no son tuyas porque a veces no estas…
Estas a mi lado cuando caigo y más aun cuando corro por no caer…
Me miras, me sigues y me haces tropezar, cuando busco más. Cuando nada me alcanza, cuando todo es demasiado poco, porque ya no estas…
Te miro y sonrío cuando navego en el mar de alucinaciones y así y todo no quiero caer a la cruda realidad…
Te necesito pero se que estas…
Que seria si estuvieses y no necesitase alucinar?
Mi imaginación ya no trabajaría por las noches buscando tu silueta tras cada estrella… tras cada roce de mi embriagada razón…
Mis responsabilidades no encontrarían su final porque estarías aca, tan firme y tan arrollador como solo vos pudiste estar…
Pero ya de nada sirve que te pida regresar, porque me enseñaste a crecer, sin tomarme de tus manos. Abriste mis ojos frente a cada adversario y sembraste en mí la compasión cuando ya no sirve discutir sino abrazar a ese hermano…
Ya no participas de mis luchas internas por verte despertar. Ahora entreduermes sigilosa y eternamente, esperando el día en que cansada y ya sin fuerzas te pida que me ayudes a parar…

1 comentario:

  1. Estas? es sin duda para tu papà. muy bello y emotivo angie!

    ResponderEliminar