::..1934 - 2004..::

Esta noche solo tu figura en mi retina y tu recuerdo en mi cabeza golpean a las puertas de mí concentración…
En el transcurso de estos años, son tantas las cosas que nos enseñaste que ni el soñador mas brillante hubiera podido imaginar que ya no estas entre nosotros, o tal vez si, pero desde un lugar donde todo lo puedes y sin embargo ya no te involucras…
Fuiste quien marco a fuego todas las características que me hacen tal cual soy y quien sin permiso vio mi alma, mis fragilidades, mis miedos y fundamentalmente mi incapacidad para luchar en un mundo al cual siempre fingiré dominar pero que no conozco en lo absoluto…
Y asi un día te fuiste, te fuiste sin despedirte, y con bronca en el pecho y lágrimas de sangre me pregunte una y otra vez cual había sido ese motivo. Sin embargo el tiempo, tan conocedor de todo, me dio las respuestas a las cosas que ya no suceden… porque a veces no queda tiempo…
Fue asi como mis pasos encontraron su rumbo por segunda vez y mi esperanza lejos estaba ya de volverte a ver cada mañana debajo de esos lentes, testigos indiscutibles, de años de sacrificio…
Aprendí tantas cosas que jamás hubiera escuchado si de tu boca salían, porque esa es la regla general. Y asi, caí en la cruel realidad de aceptar que tus palabras fueron ciertas tantas veces y tal vez esas mismas no quise escucharlas. Pero hoy ya no estas y solo me queda la esperanza de saber que estas leyendo mis líneas y secando de mi mejilla estas lagrimas…
Ya no pregunto nada porque entendí que la vida es un ciclo y mañana nos volveremos a ver, ya sin este escenario y quien sabe con que actores…
Sin embargo, daría mas de lo que tengo por una ultima vez, un ultimo abrazo, un “hasta luego...”
Pero asi surgieron las cosas, asi la vida siguió y en este trajín bailaron todos aquellos que ayer no te soltaban y hoy parecen no recordarte…
Solo se que hay momentos en los cuales prefiero borrar de mi mente pedazos de historia o aparecer juntos en el viejo camino a San Pedro y que nada de esto hubiera pasado... sin embargo de todo aprendemos, de todo aprendí y a pesar de los golpes seguimos acá, mirándonos y sabiendo que en el fondo, el sufrimiento y la ausencia son las armas mas poderosas para aprender a valorarnos... que ironía no?
Por último, y como base de un relativo final, solo te grito HASTA LUEGO, HASTA SIEMPRE… porque siempre vas a estar en mí, en todos nosotros... Te amamos PAPA!